sábado, 18 de julio de 2009

Ostras

"... Luego otra vez a escribir, y me metí tan adentro en el cuento que allí me perdí. Ya lo escribía yo y no se escribía solo, y no levanté los ojos ni supe la hora ni guardé noción del lugar ni pedí otro ron Saint James. Estaba harto de ron Saint James sin darme cuenta de que estaba harto. Al fin el cuento quedó listo y yo cansado. Leí el último párrafo y luego levanté los ojos y busqué a la chica y se había marchado. Por lo menos que esté con un hombre que valga la pena, pensé. Pero me dió tristeza. Cerré la libreta con el cuento dentro y me la metí en el bolsillo de la cartera y pedí al camarero una docena de portuguesas y media jarra del blanco seco que servían allí. Al terminar un cuento me sentía siempre vaciado y a la vez triste y contento, como si hubiera hecho el amor, y aquella vez estaba seguro de que era un buen cuento, aunque para saber hasta dónde era bueno había que esperar a releerlo al día siguiente.
Comiendo las ostras con su fuerte sabor a mar y su deje metálico que el vino blanco fresco limpiaba, dejando sólo el sabor a mar y la pulpa sabrosa, y bebiendo el frío líquido de cada concha y perdiéndolo en el neto sabor del vino dejé atrás la sensación de vacío y empecé a ser feliz..."

Ernest Hemingway - París era una fiesta

Postales - Federico Aubele


Cuando estas,
el tiempo queda.
Y las luces brillan más allá.
El sabor de mil besos,
que aún me hacen reir y hablar.
Nada más nada queda,
sólamente tu risa en el bar.
Postales, que suceden sin cesar.
Tu aroma, dulce melodía.
Aún tiene un lugar,
del recuerdo que es donde todo
sucede otra vez.
Nada más, nada queda.

jueves, 16 de julio de 2009

Rumba sabor a salitre


Al abrir mis ojos los fuertes rayos del sol ciegan mi vista temporalmente, para luego acoplarla a la delicia playera que está frente a mi. El sonido de la rumba alegra a las masas a lo lejos. El sabor a salitre se mezcla con la tintineante bebida que reposa en la mesilla al lado de la silla que soporta mi peso con constante queja. Que gusto sentir el sol quemar los poros de mi piel. Tomo la copa y la llevo a mis labios para que mi paladar se deleite con la excentricidad de bebida. El toque amargo y candente del alcohol alcanza todos mis sentidos, y el sabor a sal del mar le acompaña con extraña complicidad de gusto. El sonido del mar golpeando las rocas para luego arrivar a la playa es el compás de la rumba de las masas, así como el sabor del salitre en mi alcohólica bebida... Que ricura de calor...

Lycaón Izghar




Playtime - Recomendado



Sayaka Katsuki – violin
Pedro Eustache – saxophone
Ming Freeman – keyboards

Disfruten

martes, 14 de julio de 2009

Café de mundos


Mientras mi mirada se perdía por la ventana polvorienta, el humo del café escapaba en pequeños círculos infinitos dispersándose en la nada. La luz proveniente de la calle junto con el sonido de la ciudad ambienta mi alrededor, disfrutando de la textura del papel, suave y lisa, mientras escribo con lentitud. Me tomo un momento para admirar el gentío que camina por la acera, cada quien inmerso en sus pensamientos, cada quien en su mundo. ¿Cuántos mundos existirán así? No lo sé, quisiera saberlo. Mi mente regresa a la hoja frente a mi y al café caliente que va perdiendo su pequeña fumarola como la leña que se apaga en medio de la fogata.
"Café de mundos" pienso.

Lycaón Izghar

Decadencia

¿Quién es el único que tiene motivos para salirse de la realidad por medio de la mentira?
Aquél a quien la realidad hace padecer.
Y padecer, en este caso, significa ser una realidad frustrada.
La preponderancia del sentimiento del no placer sobre el placer,
es la causa de esta religión y moral ficticias:
Este exceso da exacta idea de lo que es la Decadencia.

Friedrich Nietzsche - El Anticristo

lunes, 13 de julio de 2009

Otoño vacío

Y camino en la soledad de esa calle vacía y sin sentido para mí.
Las sombras de los autos, las luces sin brillo, los edificios antiguos.
Nada de eso parece tener sentido pues estoy vacío.
Sólo necesito llevar tu recuerdo a mi mente y experimento un frío
Un frío helante, un frío invernal a pesar de estar en Otoño
Y este Otoño se vuelve vacío sin ti...

Lycaón Izghar